Estos baberos para comer están pensados para proteger la ropa del bebé durante las comidas. Cubren una mayor superficie del pecho y parte del abdomen, lo que los hace perfectos para evitar manchas mientras aprenden a comer solitos.
Se recomiendan a partir de los 6 meses, cuando comienza la alimentación complementaria. También son ideales para niños pequeños que van a la guardería y ya comen por sí mismos.
Sí, son perfectos como baberos para guardería porque son resistentes, cómodos y fáciles de lavar. Muchos centros piden este tipo de babero para las comidas del día a día.
Están confeccionados con algodón 100% y tejidos absorbentes o impermeables, según el modelo. Son suaves con la piel pero lo bastante resistentes para soportar lavados frecuentes.
Sí, se pueden lavar a máquina con programas delicados (máximo 30 °C). Se recomienda evitar secadora y lejía para conservar mejor los colores y tejidos.
Sí, puedes añadir el nombre del peque en vinilo o bordado. Personalízalo eligiendo tus telas favoritas desde nuestra página: Personaliza tu babero grande+.
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